Hace varios años, Malik Ibn Benaisa, predicador y con fama de estudioso del Islam, impartió una conferencia en una mezquita de Ceuta que acabó en los tribunales por sus ataques a las mujeres «que usan perfume». Ni corto ni perezoso las calificó de «fornicadoras» cuando se atreven a salir así a la calle para provocar a los hombres. Corría por entonces el verano de 2013, pero ahora el regreso de los talibanes en Afganistán ha vuelto a hacer viral aquel polémico discurso
Las mujeres, según este predicador, sólo deben mostrar el óvalo de su rostro y las manos y huir de los zapatos de tacón y los pantalones vaqueros. Un mensaje que en 2021 recuerda mucho al de Podemos. Por ejemplo, al de su actual dirigente, Ione Belarra, cuando el pasado mes de mayo se postulaba en las primarias para sustituir a Pablo Iglesias con una especie de manual de «comunicación feminista» en la que propugnaba un modelo de mujer que evite mostrarse «primorosamente arreglada» o se empeñe en aparecer demasiado «delgada», lejos de los cánones de belleza tradicionales.
En 2013, la Delegación del Gobierno de Ceuta denunció ante la Fiscalía las palabras de Benaisa por posibles delitos relacionados con la violencia de género. El Ministerio Público, sin embargo, decidió archivarla y enterrar el asunto.